jueves, 16 de agosto de 2012

11. Límite

 ¿Sabe usted a qué se le llama angustia?
 Supongamos que sí, confío en su experiencia.
 ¿Alguna vez tomó alguna medicina psiquiátrica?
 Calcule que es igual a recibir halagos y desilusiones en dosis controlables e incontrolables. Perder el control de uno y ganarlo. No saber en qué confiar. Perder la confianza en uno mismo. Dudar de si todo tiene que ver con el propio ser o con la medicación. Bueno, es eso.
 La pregunta es obvia: ¿a qué quiero llegar?
 ¿Simple?
 Estoy acá, en mi casa, sola.
 Ella haciendo mis trámites.
 Yo sin metas.
 Ahogándome en la angustia como siempre que tengo un segundo a solas.
 Hasta cuándo. Hasta dónde. Cuál es mi límite.



Puentes:

17. Mañana

 
15. Madrugar
08. Las ciudades y la vida


1 comentario:

  1. No hay limites para nada o mejor (peor) dicho solo hay uno LA MUERTE.
    Yo te entiendo más de lo que muchos creen

    ResponderEliminar